La transición puede no ser tan difícil si tienes conciencia sobre el daño que provoca el 'Fast Fashion'.
Si a este punto aún no sabes qué es el 'slow fashion' o moda lenta, no te preocupes, a continuación te explicamos su término y cómo comenzó este movimiento.
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Para entender el 'slow fashion' primero debes de conocer su contraparte, el 'fast fashion', el cual define a toda aquella prenda de bajo costo y poca calidad que te impulsa a seguir adquiriendo nuevas piezas al pasar de unas semanas. En pocas palabras, tienen una corta vida util.
Esto a su vez genera gran impacto de diferentes maneras, tanto ambiental como social.
Maneras en la que afecta el 'Fast Fashion'
El costo humano
Gran parte de esta ropa está hecha por personas que intentan vivir con salarios sorprendentemente bajos, que trabajan en condiciones difíciles y una intensa presión para trabajar más rápido y producir más, según información de Longevity. Es este sistema el que mantiene los precios bajos y las tiendas bien abastecidas con un inventario en constante cambio.
Impacto ambiental
Un informe de Pulse of the Fashion Industry encontró que la moda genera el 4% de los desechos del mundo cada año, contribuyendo con la friolera de 92 millones de toneladas al año. Mucho de eso proviene de recortes, o piezas de tela de formas extrañas que quedan del proceso de corte, según información de Forbes.
¿Cómo ayuda la 'Slow Fashion'?
La moda lenta, por otro lado, generalmente la hacen personas a las que se les paga y se les trata de manera justa, y los artículos pueden incluso fabricarse en el mismo país en el que se venden, lo que reduce su huella de carbono y ayuda a preservar los puestos de trabajo. Por lo tanto, se compra menos ropa con menos frecuencia y, por lo general, está en mejores condiciones y en buena conciencia.
Además, ahorrarás bastante dinero, no es lo mismo estar comprando una camiseta de $200 pesos casa mes que una sola de $500 pesos en un año.
¿Cómo puedo cambiar a 'Slow Fashion'?
Concéntrate en construir un guardarropa básico de prendas clásicas, bien hechas, que te queden bien y se vean genial en ti: piezas que buscarás nuevamente durante los próximos años.
Ahora, eso no significa que tengas que descartar por completo los artículos de moda, así que mételos en tu guardarropa como mejor te parezca. La clave es hacer que resalten las piezas que más usas, en lugar de llenar todo tu armario con todas ellas.
Será entonces cuando tengas un armario equilibrado.