Recuerda que mantener una buena hidratación es lo más importante mientra realizas tu rutina de ejercicio.
La primavera llegó y la temperatura ha comenzado a elevarse, un gran indicador que señala que es el momento de comenzar a cuidar nuestra hidratación aún más, especialmente si solemos hacer ejercicio.
La leche de avena es buena para la hidratación. | Unsplash.
Es por tal motivo que a continuación te mencionamos cuáles son los alimentos con los que puedes mantener un equilibrio de electrolitos en tu cuerpo:
Nueces y semillas
Las nueces y semillas como almendras, cacahuetes, anacardos y semillas de girasol son una rica fuente de magnesio y fósforo. Lo que te dará un plus para aumentar tu energía.
Plátanos
Debido a que están llenos de electrolitos como el potasio, los plátanos son súper hidratantes, además se trata de una fruta portátil y fáciles de digerir. Incluso hay investigaciones que demuestran que comer plátanos antes o durante un gran entrenamiento puede ayudarte a mantenerte lleno de energía.
Sandía
Esta fruta es un rico bocadillo rico en potasio. Se aconseja espolvorear un poco de sal encima para realzar su sabor natural y obtener algo de sodio antes de hacer ejercicio.
Naranjas
Comerte una naranja o beber un poco de jugo de éste fruto recién exprimido puede ser una buena opción para cargar agua, calcio, magnesio y potasio en nuestro cuerpo.
Aguacates
Los aguacates son una fruta deliciosa y saludable para el corazón que se puede comer sola, en pan o en su plato o ensalada favoritos. Están llenos de potasio y magnesio, dos minerales que los atletas a menudo agotan debido al estrés en el cuerpo.
Jugos vegetales crudos prensados orgánicos
Esta noticia no es nada nueva, no obstante, si no eres amante de las verduras cocidas, puedes realizar un jugo de estas, de esta manera puedes disipar el sabor con alguna fruta que sea de tu gusto.
Agua de coco
Si está buscando una manera rápida y fácil de consumir electrolitos sin tener que hacer un batido o visitar una tienda de jugos, pruebe el agua de coco. Es súper hidratante y lleno de minerales.
Leches no lácteas
La leche de avena, la leche de coco y otras alternativas a la leche de origen vegetal están repletas de magnesio y potasio y pueden ser más fáciles para el intestino para cualquier persona sensible a los lácteos.