Entrena correctamente tu suelo pélvico para mayor placer sexual

¿Acabas de ser mamá o ha disminuido tu sensibilidad durante las relaciones sexuales? Esto puede interesarte.  

Caída de la vejiga, dificultad para alcanzar el orgasmo, relaciones sexuales dolorosas, incontinencia urinaria o hasta fecal, o por el contrario, estreñimiento, son padecimientos que si bien no ponen en riesgo tu vida, sin duda pueden afectar tu autoestima y calidad de vida.

Todos estos problemas podrían estar relacionados con la falta de tonicidad de la musculatura del suelo pélvico, y si bien suelen afectar más a mujeres con hijos o en etapa menopáusica, también puede pasar factura a hombres, niños o deportistas de élite e incluso personas sedentarias, con alergias (por la tos constante) y hasta músicos de instrumentos de viento, en fin a todos aquellos que exponen a su suelo pélvico a un estrés constante.

Pero ¿por qué la relevancia de mantener una musculatura del suelo pélvico saludable? Pues simplemente porque es la estructura del cuerpo que le da el soporte a nuestro intestino, vejiga y útero. Si se debilita, puede comenzar a producir trastornos sumamente molestos, tales como la pérdida de orina.

Si bien se conocen las principales causas de la flacidez del suelo pélvico, tales como el embarazo y parto, hasta por cambios hormonales durante la menopausia, hablar de sus consecuencias suele ser tabú, pero reconocer nuestra fisiología y lo que está mal en ella, así como, una vez detectado un problema, ponernos en manos de expertos puede ser un buen inicio para darle una solución. Sin embargo, siempre será mejor prevenir que lamentar. 

Es por eso que, tomando en cuenta su área de experiencia, entrenadores de Fit Jeff, cadena de gimnasios, comparten do´s y dont’s fitness de lo que puedes hacer para mantener saludable tu suelo pélvico. Toma en cuenta estos consejos y preve antes de lamentar, sobre todo si en tus planes futuros está ser mamá (o ya lo eres), mantener ese sexo placentero que tanto nos gusta, y evitar algún tipo de incontinencia.

Lo que debes saber es que si quieres incorporar ejercicios preventivos, es necesario que tengas un diagnóstico de un especialista en Ginecología o de un fisioterapeuta experto en suelo pélvico. Una vez conocido tu estado, se decidirá qué tipo de ejercicios específicos (y generales), se pueden incorporar a tu programa de entrenamiento. Lo ideal es que empieces también a prestar atención a la técnica, postura y soporte del suelo pélvico.

Aquí algunos consejos

●     Respirar. Si en tu actividad empujas, tiras o levantas, es decir, en el momento de mayor esfuerzo, es necesario exhalar, así evitas tensión en la zona pélvica.

●     La técnica del ejercicio es la base, tener una buena postura y realizarlo correctamente evitará lesiones en la musculatura pélvica.

●     Los ejercicios con las piernas abiertas no siempre son buenos para tu suelo pélvico. Debes asegurar una apertura que te dé pleno control y estabilidad. Lo más recomendable es una separación de pies a la altura de la cadera.

●     Si eres principiante, hacer ejercicio de un modo intenso no será bueno para tu suelo pélvico. Por eso, debes aumentar poco a poco el tiempo, la resistencia (peso) y el número de repeticiones, comenzando con un número reducido y asegurando un buen descanso entre series, y tras el entrenamiento completo.

Haz de tu suelo pélvico una roca

Ahora lo que sí debes hacer. Como bien dijimos, más vale prevenir que lamentar, por lo que lo ideal es que tu rutina de entrenamiento incluya una para tu suelo pélvico.

●     Ejercicios de Kegel (2-3 días por semana durante 15 min)

Los músculos a ejercitar son aquellos que cuando tratas de retener la orina son los que se sienten, al igual que aquellos vaginales que se sienten al introducir un tampón o los dedos. Ahora imagina que te sentarás sobre una esfera muy pequeña y contrae los músculos pélvicos como si estuvieras levantando, luego descansa a la cuenta de tres.

Para obtener mejores resultados, solo tensa los músculos del suelo pélvico. Presta atención de no flexionar el abdomen o los glúteos. Respira de manera normal durante el ejercicio.

Cabe mencionar que estos consejos no sustituyen visitas con médicos o fisioterapeutas especializados en casos de que ya exista un problema. A través del expertise en fitness solo se exponen algunos consejos para prevenir.

Noticias Relacionadas

TE PUEDE INTERESAR

MÁS NOTICIAS

MÁS NOTICIAS