Recuerda que éste órgano requiere de cierta actividad para mantenerse sano.
El cerebro debe de ejercitarse cual si fuera un músculo, pues aunque no lo sea, éste requiere mantenerse en práctica para gozar de buena salud.
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Es por tal motivo que a continuación te mencionaremos los actos que debes de realizar para tener un cerebro saludable.
Maneras de ejercitar el cerebro
Úsalo
Es cierto: Úselo o piérdalo. Estirar tu cerebro mantiene tu mente alerta. Las personas que son más activas en actividades mentalmente desafiantes tienen más probabilidades de mantenerse alerta. Prueba estos:
- Lee un libro.
- Ve a una conferencia.
- Escuchar la radio.
- Jugar un juego.
- Visitar un museo.
- Aprenda un segundo idioma.
Mezclar las cosas
¿Recuerda haber tratado de hablar al revés cuando era niño? Los investigadores de la Universidad de Duke crearon ejercicios que llaman "neurobic", que desafían al cerebro a pensar de nuevas formas. Dado que sus cinco sentidos son clave para aprender, utilícelos para ejercitar su mente. Si es diestro, intente usar la mano izquierda. Conduzca al trabajo por otra ruta. Cierre los ojos y vea si puede reconocer la comida por el gusto.
Haga ejercicio para mantenerse alerta
El ejercicio, especialmente el que aumenta su frecuencia cardíaca, como caminar o nadar, también tiene ventajas mentales. Aunque los expertos no están seguros de por qué, la actividad física podría aumentar el suministro de sangre al cerebro y mejorar los vínculos entre las células cerebrales. Mantenerse activo puede ayudar a la memoria, la imaginación e incluso a su capacidad para planificar tareas.
Una dieta saludable desarrolla la capacidad intelectual
Hazle un favor a tu cerebro y elige alimentos que sean buenos para tu corazón y tu cintura. Ser obeso en la mediana edad hace que tengas el doble de probabilidades de tener demencia más adelante. El colesterol alto y la presión arterial alta también aumentan sus posibilidades. Pruebe estos sencillos consejos:
Hornee o ase los alimentos en lugar de freírlos.
Cocine con grasas "buenas" como aceites de nueces, semillas y aceitunas en lugar de crema, mantequilla y grasas de la carne.
Coma frutas y verduras de colores.
Come pescado.
Mira lo que bebes
Sabes que demasiadas bebidas pueden afectar tu juicio, habla, movimiento y memoria. ¿Pero sabías que el alcohol puede tener efectos a largo plazo? Beber demasiado durante un período prolongado puede encoger los lóbulos frontales de su cerebro. Y ese daño puede durar para siempre, incluso si deja de beber. Una cantidad saludable se considera una bebida al día para las mujeres y dos para los hombres.
Los videojuegos entrenan su cerebro
Coge ese joystick. Varios estudios encontraron que los videojuegos estimulan las partes del cerebro que controlan el movimiento, la memoria, la planificación y las habilidades motoras finas. Algunos expertos dicen que los juegos solo te hacen mejor jugando. Es posible que el veredicto aún se haya emitido, pero ¿por qué dejar que los niños se diviertan?
La música ayuda a tu cerebro
Gracias a tu mamá por hacerte practicar el piano. Tocar un instrumento temprano en la vida vale la pena pensar con más claridad cuando eres mayor. La experiencia musical estimula las funciones mentales que no tienen nada que ver con la música, como la memoria y la capacidad de planificar. También ayuda con una mayor coordinación de las manos. Además, es divertido y nunca es demasiado tarde para empezar.
Haz amigos para tu mente
¡Sea una persona sociable! Hablar con otras personas agudiza tu cerebro, ya sea en el trabajo, en casa o en tu comunidad. Los estudios demuestran que las actividades sociales mejoran tu mente. ¡Así que sea voluntario, inscríbase en una clase o llame a un amigo!
Mantener la calma
Demasiado estrés puede dañar la materia gris, que contiene células que almacenan y procesan información. Aquí hay algunas formas de relajarse:
El juego de nombres
¿Tiene problemas para recordar nombres? Siempre repite el nombre de una persona mientras le hablas, al menos en tu cabeza, si no en voz alta. O invente una imagen divertida o una rima que vincule con su nombre. Por ejemplo, piense en Bob flotando en el océano.